Roberta Invernizzi es sin duda una de las voces más destacadas de la música barroca, contribuyendo desde hace ya algunos años, gracias a su cristalina voz de soprano y un infalible sentido dramático, al redescubrimiento de muchas músicas olvidadas, especialmente las procedentes de su país natal. Nacida en Milán, sus estudios musicales se centraron en un principio en el piano y el contrabajo, antes de decidirse por el canto bajo la tutela de Margaret Heyward, especializándose más tarde en los repertorios barroco y clásico.
El especial talento de Invernizzi a la hora de caracterizar a sus personajes ha quedado sobradamente demostrado a lo largo de la multipremiada serie de grabaciones de cantatas italianas de Haendel junto al director Fabio Bonizzoni, en las que retrata de forma visceral y vívida a toda una galería de figuras arcádicas, desde diosas y ninfas hasta simples pastoras. Sus formidables habilidades han inspirado a Fabio Bonizzoni –en un pasticcio operístico creado en torno a una serie de arias en italiano de André Campra, Gli strali d’Amore– a escribir una serie de recitativos pensando especialmente en ella. También Antonio Florio, protagonista en los últimos años del formidable revival de la música barroca napolitana con su conjunto I Turchini, ha quedado prendado de la voz de Invernizzi y colabora con ella de forma regular. En escenarios operísticos, hemos visto a Invernizzi en Rinaldo y Agrippina de Haendel, en Ercole sul Termodonte de Vivaldi y en L’Orfeo y L’incoronazione di Poppea de Monteverdi (y en Mozart, Grétry y Berton). La prensa internacional subraya su intensidad y delicadeza, su gran control de la afinación y del fraseo y su “resplandor tímbrico”, además de alabar su gran sensibilidad, refinamiento y sutileza.
Además de su presencia en la mencionada serie de cantatas italianas de Haendel (una selección se puede escuchar en Handel in Italy, editada en la colección “Portrait”), la larga colaboración de Invernizzi con Fabio Bonizzoni y La Risonanza ha conducido a un disco de arias operísticas de Vivaldi en las que la soprano se erige en la protagonista principal. Invernizzi también trabaja regularmente con otros directores especialistas en la música vivaldiana, como Rinaldo Alessandrini, Alan Curtis y Fabio Biondi, entre otros.