FRÉDÉRIC CHOPIN Late piano works
GCD 922517
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Edoardo Torbianelli, piano (grand piano by Ignace Pleyel, 1842)
Production details
Total playing time 74:57 Recorded at Fondation Royaumont, Asnières-sur-Oise, France, in March 2017 Engineered and produced by Alban Moraud Executive producers: Thomas Drescher, Carlos Céster Booklet essay by Jeanne Roudet Booklet in English – Français – DeutschMade in Austria
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FRÉDÉRIC CHOPIN (1810-1849) Obras tardías para piano
01 Prélude in C sharp minor, op. 45 02 Mazurka in C sharp minor, op. 50/3 03 Nocturne in B major, op. 62/1 04 Nocturne in E major, op. 62/2 05 Polonaise-Fantaisie in A flat major, op. 61 06 Mazurka in A flat major, op. 50/2 07 Barcarolle in F sharp major, op. 6008 Mazurka in F sharp minor, op. 59/3
Sonate in B minor, op. 58 09 Allegro maestoso 10 Scherzo: Molto vivace 11 Largo 12 Finale: Presto non tanto
13 Mazurka in G major, op. 67/1
Acerca de este álbum
Con este CD de obras tardías de Chopin, Late piano works, Edoardo Torbianelli vuelve a combinar la poesía de su pianismo con el rigor de sus investigaciones musicológicas. Al lado de la experta Jeanne Roudet, que firma el ensayo contenido en el libreto, Torbianelli ha afrontado con mirada innovadora la música compuesta por Frédéric Chopin en los últimos 15 años de su vida. También en la colección de la Schola Cantorum Basiliensis y también en Glossa, Torbianelli ya presentó hace algunos años la producción Pian e forte. Ahora, ha utilizado un grand piano de Ignace Pleyel para registrar en la Fondation Royaumont francesa obras como la Polonaise-Fantaisie op. 61, la Sonata en si menor op. 58 o una selección de Mazurkas y Nocturnes.
Con este programa, Edoardo Torbianelli sitúa el acercamiento de Chopin más cerca de su herencia polaca; aunque después saldría exiliado, el compositor estuvo presente en Varsovia hasta justo antes del Levantamiento de Noviembre de 1830. A diferencia de Berlioz y Liszt, se argumenta en esta producción, Chopin evitó la literatura como inspiración directa y –de nuevo a diferencia de Liszt– su música para piano comparte similaridades técnicas y de estilo interpretativo con la escuela del bel canto, descendiente del arte de los castrati del XVIII y perpetuado en el XIX por cantantes italianos como los escuchados por el propio Chopin en París. La “vocalidad” resultante en su obra encuentra su fiel reflejo en las interpretaciones de Torbianelli, un acercamiento fresco a un compositor genial.