CHARLES-SIMON CATEL Sémiramis Tragedia lírica. París, 1802
Le Concert Spirituel Hervé Niquet
GCD 9216252 CDs
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Maria Riccarda Wesseling, mezzosoprano Gabrielle Philiponet, soprano Mathias Vidal, tenor Nicolas Courjal, bajo Andrew Foster-Williams, bajoNicolas Maire, tenor
Le Concert SpirituelHervé Niquet, dirección
Production details
Grabado en vivo el 25 de julio de 2011 en la Opéra-Berlioz Le Corum, Montpellier (Francia) Toma de sonido: Joël Soupiron Dirección artística: Raffi Kevorkian Producción ejecutiva: Carlos Céster Diseño: Valentín Iglesias Texto: Alexandre DratwickiInglés – Francés – Alemán
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CHARLES-SIMON CATEL (1773-1830)SémiramisTragedia lírica. París, 1802
CD I [35:19]
OuvertureActe premier
CD II [70:02]
Acte deuxième Acte troisième
About this CD
Estrenada en 1802 en la ópera de París, Sémiramis de Charles-Simon Catel encarna, junto a algunas otras obras de este tiempo, la renovación de la tragedia lírica heredada de Gluck. Con un toque de exotismo que acentúa tanto lo patético del aislamiento como la pompa de los ambiciosos finales, la obra celebra su despedida del estilo «Luis XVI» para anunciar la grand opéra romántica mediante el prisma de lo que solemos llamar el neo-clasicismo. Pero eran tiempos de polémica entre defensores y detractores del nuevo Conservatorio, en el que Catel, bien situado, se había creado tantos enemigos que el patio de butacas se estremeció rebosando hostilidad vengativa cuando se levantó el telón para el primer acto...
Hervé Niquet y su Concert Spirituel, que este año celebra su 25º aniversario, continúan con su incansable recuperación de tragédies lyriques olvidadas (recordemos sus Callirhoé de Destouches, Sémélé de Marais, Proserpine de Lully y Andromaque de Grétry) con esta grabación de Sémiramis de Catel realizada durante el Festival de Radio France, en Montpellier, en julio de 2011. El habitual acierto de Niquet a la hora de escoger a sus cantantes, entre los que podemos destacar especialmente a Maria Riccarda Wesseling y Andrew Foster-Williams, hace que esta nueva entrega lírica sea, una vez más, una estimulante sorpresa para todo amante de la mejor música francesa.